Uno de los espacios del hogar que más se dificulta mantener impecable es el baño. Esto ocurre, en parte, por las manchas, el óxido y el sarro que se acumula en las canillas y el inodoro a medida que pasa los años.
No obstante, existe un truco efectivo, fácil de seguir y sin necesidad de productos químicos agresivos o ingredientes difíciles de conseguir. Este método, conocido entre los expertos en limpieza, usa ingredientes simples que probablemente tengas en tu casa.
A continuación, los ingredientes que necesitarás para dejar tu inodoro y baño como nuevo:
- Jugo de limón y sal gruesa: en este caso se deben exprimir dos limones y mezcla su jugo con sal gruesa. Verter esta mezcla en el inodoro y deja reposar durante 10 minutos. Luego, frotar las manchas con el cepillo y tira de la cadena para enjuagar.
- Agua caliente y bicarbonato de sodio: hervir suficiente agua, deja que se enfríe un poco y verter en el inodoro. Añadir media taza de bicarbonato de sodio y deja reposar por 15 minutos. Frotar luego las manchas con el cepillo.
- Vinagre blanco y bicarbonato de sodio: verter una taza de vinagre en el inodoro y deja actuar durante 10 minutos. Luego, añade una cantidad generosa de bicarbonato de sodio y frota bien las manchas con un cepillo. La mezcla de estos dos ingredientes ayudará a que el sarro se desprenda más fácilmente.
Así se puede prevenir la acumulación de sarro
Estos son algunos tips para prevenir la acumulación de sarro en lugares como baños y cocina:
- Limpieza regular: realizar una limpieza profunda del inodoro al menos una vez por semana para evitar que el sarro y las manchas difíciles se acumulen.
- Usa vinagre blanco regularmente: rociar vinagre blanco en el interior del inodoro y deja actuar unos minutos antes de frotar con el cepillo. El vinagre es un excelente limpiador natural, desinfecta y elimina el sarro.
- Reparar fugas de agua: si el inodoro tiene fugas, repáralo cuanto antes. El goteo constante fomenta la formación de sarro y moho, además de desperdiciar agua.
- Cepillado diario: hacer una pasada rápida con el cepillo todos los días para evitar la acumulación de residuos y mantener el inodoro fresco entre limpiezas profundas.
- Evitar productos abrasivos: utilizar productos naturales o específicos para baños. Los limpiadores demasiado fuertes pueden dañar la porcelana y hacer que el inodoro se ensucie más rápidamente.
- Ventilación adecuada: asegurarse de mantener el baño bien ventilado, ya que la humedad favorece la acumulación de bacterias y malos olores. Si es posible, abre la ventana o utiliza un extractor de aire.
- Usa tabletas limpiadoras: colocar una tableta limpiadora en el tanque de vez en cuando. Estas tabletas ayudan a mantener el inodoro libre de sarro y aportan un aroma fresco.