Rial y Ventura, Monti y Rocassalvo, Pergolini y De La Puente, la China Suárez y Gimena Accardi, Zaira Nara y Paula Chaves, Marcelo Tinelli y Sebastián Ortega, etcétera. La lista farandulera de los «amistades que parecían irrompibles pero un día se destruyeron como si chocaran contra una pared» sumó en las últimas horas a la de Alejandro Fantino y su «ladero de toda la vida», Tronco.
La diferencia de este conflicto con todos las anteriores es el motivo de la «ruptura», pues se distanciaron por cuestiones políticas que no tienen que ver con lo laboral, con lo personal ni con lo afectivo que potenciaron aquellas. En la actualidad los dos abrevan, simpatizan, militan y sostienen las ideas que pregona el presidente Javier Milei a través de su partido La Libertad Avanza. Sin términos medios, se volvieron fanáticos «del Javo».
«Tronco» es Sergio Figliuolo, toda la vida mano derecha de Fantino en sus distintas aventuras periodísticas (en la radio solía ser panelista y muchas veces productor) y desde el 10 de diciembre Diputado Nacional electo en los comicios de octubre, donde el oficialismo logró un sólido (y para muchos sorprendente) triunfo sobre los candidatos del Peronismo y otros partidos de menor territorialidad
En su primera actividad parlamentaria, sucedió algo impensado: Tronco, que durante meses y meses agitó los micrófonos del canal de stream Neura gritando todo tipo de barbaridades «contra los kukas» y prometió «barrerlos de la faz de la tierra, terminó votando en consonancia con los diputados K por «orden y verticalismo partidario». Fantino no le perdonó eso.
LA PELEA MENOS PENSADA: ALEJANDRO FANTINO SE DISTANCIO DE TRONCO
En su programa -de la misma señal, Neura- Fantino fue muy irónico con Tronco porque mientras daba su discurso se iban filtrando imágenes donde se contaba que el diputado «votó lo mismo que los K» en una votación que se llevó a cabo a las tres de la madrugada. «A esa hora se votan cosas como para que nadie se entere, es como algo vergonzante» se dijo también.
Además, se repetía una y otra vez un cuadro en el que aparecían «los votos positivos» y se podía observar el voto de Tronco al lado de Juan Grabois, considerado «más K que la misma Cristina» y una de las figuras políticas más rechazadas por Milei y los simpatizantes libertarios. «Ahora tienen que cambiar de nombre, ahora son La LiberKá avanza» bromeó «La Mona Lazarte», otro de los panelistas del programa, en una burla que fue muy celebrada por Fantino. Esta sí que nadie la vio.
